Cuando se está decorando una casa, uno piensa en sillas, sillones, butacas… pero, ¿no has pensando en lo prácticos que pueden ser los puffs? De hecho, ya hay mucha gente que está sustituyendo sus sillones por este fantástico accesorio para tu hogar.
¿Te gustaría saber porque todo el mundo quiere tener uno en casa? ¿Por qué los diseñadores apuestan tanto por ellos? ¡Pues sigue leyendo para comprender la majestuosidad de los puffs!
Para cualquier habitación
La primera ventaja de los puffs es que, debido a la gran cantidad de modelos y diseños que hay, se pueden utilizar en cualquier habitación de la casa. Puedes poner uno en el dormitorio que te sirva para sentarte, en lugar de un banco, para calzarte, un par en el salón para cuando tienes invitados, uno en el cuarto de tus hijos para cuando jueguen en el suelo…
Incluso en estancias como la cocina y el cuarto de baño se están empezando a utilizar estos pequeños asientos. En los jardines también son bastante populares, sobre todo para zonas techadas para tener un pequeño espacio en el que ponerse tres o cuatro personas.
Apenas ocupan espacio
¿Te has parado en pensar en la cantidad de espacio que te va a ocupar un sillón? ¿O una butaca? ¡Un puff te ocupa mucho menos que eso! Además, son tan pequeños que, cuando no los vayas a usar, los puedes apartar a un lado.
Es más, cuando te vayas a comprar un sofá, ¿sabías que algunos tienen puff que se esconden dentro de la estructura cuando no se están utilizando? ¡No quedan a la vista ni te ocupan espacio, por lo que son ideales para casas con habitaciones pequeñas!
Un tipo de puff para cada ocasión
¿Sabes que existen diferentes tipos de puff y que cada uno se usa para una situación diferente? Por ejemplo, pongamos que alguien se va a quedar a dormir de improvisto en tu casa, y no tienes sitio para él.
Pues teniendo un puff cama, que también puede servir como asiento, ya tendrá un lugar en el que dormir. Que no te engañen, para cuando tienes invitados, es la solución ideal, ¡porque puedes seguir utilizándolo el resto del tiempo por tu cuenta!
¿Qué no hay suficiente sitio para todos en el sofá y los críos se suelen poner en el suelo? No dejes que se sienten sobre una alfombra que puede estar llena de ácaros. Un puff pera es lo que necesitas para tus hijos. Son cómodos, de un tacto agradable y luego lo pueden tener en su cuarto.
¿Qué andas un poco falto de espacio en el salón y no hay sitio para una mesa de centro? Puedes poner un puff que se abra por la mitad. Por fuera será suave y blandito, perfecto para sentarse y apoyar los pies. Por dentro, una estructura sólida con espacio de almacenaje, en el que dejar los mandos por la noche, guardar papeles importantes… ¡lo que quieras! Una versión bastante económica, y a la que seguro que le acabarás sacando mucho juego.